8.11.09

Nudo en la garganta

Siempre que me hacen preguntas como: Cómo estas?, Que te pasa?, Qué contas? respondo con un bien poco creible o un nada muy fingido acompañado generalmente de una sonrisita de compromiso.
La verdad es que me pasan miles de cosas y hay días que realmente no estoy ni me siento del todo bien pero también es cierto que contando el problema no puedo solucionar o resolver absolutamente nada ¿Entonces para qué exponerse tanto?
Lo que me pasa no lo elijo y lo que siento no lo manejo; son esas las razones por las cuales tengo que camuflar tantas palabras, tantas reacciones y sensaciones. Automáticamente, cuando me encuentro ante el foco del problema, cambio de rumbo la mirada y me dirijo en dirección contraria porque si bien puedo fingirlo, realmente no quiero aguantarlo.
Las palabras que me trago no me las olvido, simplemente las archivo en un cajón para decirlas en algún momento apropiado. Tengo miles de pendientes y avisos de deudas para repartir por el mundo, para ser expulsadas violentamente.